
Tengo una gran curiosidad, por los temas de espiritualidad, sanación, agradecimiento y reconocimiento de lo que nos rodea. Me quiero devorar todos los libros sobre los que oigo o leo comentarios, quiero escuchar conferencias que encuentro grabadas o en internet, asistir a talleres, etc. y me doy cuenta de que siempre, al ponerme en contacto con esa información, al internalizarla y reconocer su potencial transformador mi pensamiento, mi actitud es “Quiero compartir este mensaje, esta enseñanza” y me veo en mi mente haciéndolo… y se siente bien.
Pero al igual que siento ese deseo, esa emoción, también mi mente me regresa a la “realidad” y me pregunto, “¿Con quién vas a compartir, cuándo, en dónde, cómo …?” Afortunadamente en esa conversación mental también aparece con frecuencia una de las enseñanzas más valiosas que he recibido, “Tu problema es el QUE, el COMO es del universo”. Y entonces me repito a mi misma que lo importante es que acepte el QUE, esto quiere decir que lo que yo quiero es compartir, comunicar. Ese es el QUÉ, y eso es lo único que me corresponde a mi. El COMO, es donde entra la infinita creatividad del universo.
Hace un par de meses, de la manera más inesperada llegó el CÓMO de mi deseo de la mano de mi amiga Katherine Andarcia. Katherine acababa de empezar su nuevo espacio radial ALMA CELESTIAL y con la generosidad que la caracteriza, me invitó a compartirlo. Una prueba mas de que hay que dejárselo al universo, porque yo jamás me lo había imaginado así. Nada mas y nada menos que ACTUALIDAD RADIO 1020 Y 1040, en Miami. Esa es la ventaja de desapegarse, de tener la intención y permitir que el flujo del universo nos lleve. Estar preparados, estar emocionados, trabajar en lo que nos gusta, estar confiados. Eso es lo único que tenemos que hacer. Tuve el deseo de compartir lo que recibía y el camino se presentó, todas las puertas se fueron presentando ante mi y decidí abrirlas y ha sido maravilloso todo lo que he descubierto detrás de ellas. De esta manera sorprendida, emocionada y agradecida comenzó para mi una nueva y excitante aventura, la radio.¡Qué maravilla!
Mi segmento radial lo llamé DESPERTANDO TU SERENIDAD porque en cierto modo lleva la misma intención de las clases de introducción a la meditación, respiración y yoga que vengo enseñando desde hace algún tiempo y que se llama Despierta tu Serenidad. De esta manera, desde hace unas cuantas semanas cada sábado a las 11 de la mañana mi deseo se hace realidad, porque en ese momento los cómo, dónde, cuándo tienen una respuesta y a través de la radio comparto enseñanzas de tantos maestros que se han cruzado en mi camino, bien sea en persona, través de sus libros o por otros medios, comparto buenas noticias, buenas ideas, enseñanzas y experiencias que nos ayudan a vivir una vida más sana, feliz y plena, que nos ayudan a conectarnos con nuestra verdadera esencia. En otras palabras el QUE del principio de este relato. Por eso me siento feliz y agradecida.