El Poder de la Palabra, 4 Maneras de Aprender a Usarlo.

“La ciencia moderna aun no ha producido
un medicamento tranquilizador tan eficaz
como lo son unas pocas palabras bondadosas.”
Sigmund Freud

Todos podemos dar fe del poder de la palabra, en nosotros y en los demás. Con seguridad hemos vivido o hemos presenciado el efecto de unos pocos sonidos dichos con intención. Sabemos que las palabras pueden crear y también destruir, nos consta que hay palabras que nos motivan y también que hay otras que nos  aterrorizan. Podemos dar fe de que las palabras nos pueden llegar como armas letales y también pueden resultar una medicina milagrosa.

Es innegable que las palabras tienen más poder de lo que creemos y es así porque ellas llegan a la mente y también al corazón.

La Palabra Silenciosa

Nuestras palabras existen no sólo en nuestra voz, en nuestros labios, ellas se originan en nuestra mente, allí son nuestros pensamientos y expresan sentimientos, ideas, temores y deseos. En nuestra mente empiezan a crear…o a destruir y por consiguiente, no sólo son importantes las palabras que decimos en voz alta, las que nutren nuestros pensamientos, nuestra conversación interna, esas, son el origen de todo.

Hay una hermosa y sabia frase que lo resume de la manera siguiente:

“Tus creencias se transforman en tus pensamientos.
Tus pensamientos se transforman en tus palabras.
Tus palabras se transforman en tus acciones.
Tus acciones se transforman en tus hábitos.
Tus hábitos se transforman en tu carácter.
Tu carácter determina tu destino”

La Palabra Vive y da Vida

A través de la palabra, vive la humanidad pues ella ha transmitido el conocimiento, las tradiciones, la historia. El poder de la palabra se ha reconocido desde la antigüedad. Los místicos de las grandes culturas, las hindúes, budistas y judíos creían que la palabra creaba e impregnaba todo lo que existe y en los distintos textos sagrados encontramos expresiones que nos dicen que el universo surgió de la palabra.

En el principio ya era la Palabra, y aquel que es la Palabra era con el Dios, y la Palabra era Dios.” Juan 1:1. Biblia Jubileo 2000.

De manera consciente utilizamos  el poder de la palabra en afirmaciones, oraciones, mantras y decretos. La expresión energética de la palabra es una vibración y sabemos que esa energía puede transformar la materia. Una demostración científica de este poder nos la brindó el Dr. Masaru Emoto con una serie de experimentos con agua que evidencian de manera dramática el poder de la palabra.

El Dr. Emoto sometió muestras de agua a distintas palabras y pensamientos, y los cristales de hielo que se formaron respondieron a la calidad de la energía, de la vibración, de la palabra. Cuando las palabras o sentimientos a los cuales estuvieron expuestas las muestras eran positivos, bondadosos, amorosos, se formaron hermosos cristales simétricos, cuando las palabras o sentimientos eran negativos, cargados de odio y destrucción, los cristales resultaron deformes y hasta grotescos.

Ejerciendo el Poder

Hemos escuchado mas de una vez aquello de que debemos ser la diferencia que queremos ver en el mundo. Una manera directa y efectiva de ser esa diferencia es con el poder de nuestra palabra, por lo que si queremos traer bienestar al mundo, es importante que las palabras que hablemos y los pensamientos que entretenemos reflejen ese deseo.

Cada momento, en cada acción que realizamos tenemos opciones, eso incluye lo que pensamos,  lo que decimos y cómo lo decimos. Por lo tanto es importante hacernos CONSCIENTES de esa responsabilidad y ESCOGER palabras que transmitan lo bueno, lo verdadero, lo positivo, lo que construye, no sólo para nosotros sino para todos quienes nos escuchan.

Esto puede parecer sencillo, pero no lo es. Si regresamos por un momento a la frase que cité anteriormente, veremos que los pensamientos, las palabras, las acciones, todos se originan en nuestras creencias. Esas creencias que no necesariamente son nuestras, que no necesariamente son válidas o justas en este momento, en el momento en que estamos escogiendo las palabras que necesitamos usar. La familia, la educación, la sociedad, nos han inculcado creencias que irremediablemente vienen cargadas de historias, circunstancias y juicios y es por eso que es tan importante hacernos conscientes de lo que sucede en nuestras mentes, de las conversaciones que mantenemos allí, ahora, en este momento.

Maneras de Hacer Buen Uso del Poder de la Palabra

Para hacer el mejor uso posible del poder de nuestras palabras debemos poner atención a la manera como las utilizamos, a la intención con que las pronunciamos. Las siguientes preguntas nos pueden ayudar a orientarnos:

    1. ¿Como me califico a mi mismo en mis conversaciones internas?

    Esta pregunta la podemos responder haciéndonos conscientes de los adjetivos que acompañan la expresión YO SOY, cada vez que la utilizamos. ¿Son positivos, o son negativos?¿Están mis opiniones sobre mi misma cargadas de compasión o por el contrario son sólo juicios y críticas?

    1. ¿Qué emoción caracteriza las frases que construyo?

    Antes de hablar, detengámonos a observar y a analizar las frases que más usamos durante el día y preguntémonos: ¿Son expresiones constructivas? ¿Expresan agradecimiento? ¿Utilizo palabras amables?, ¿Es necesario decirlas? O, son expresiones llenas de juicios, recriminación, lamentos y violencia.

    1. ¿Qué decido transmitir?

    ¿Cuál es la energía que predomina en mis interacciones?, ¿Qué sienten las personas que se acercan a mi? ¿Soy tolerante o soy intransigente? ¿Soy generoso, con mis palabras y actitudes? ¿Comparto amor, atención, afecto y aprecio?

    1. Apreciando la oportunidad y el valor del silencio

    Nuestra reflexión sobre el valor de las palabras necesariamente pasa por considerar  que muchas veces la mejor palabra es la que no se dice. En el silencio, podemos transmitir todas las emociones y  muchas veces los silencios expresan de manera perfecta la mayor sabiduría.

    Los invito a que usemos de manera consciente el poder de nuestra palabra, afirmando cada día desde el corazón nuestro aporte al mundo que queremos crear:

    “Yo soy paz, yo soy alegría, yo soy amabilidad,

  1. yo soy abundancia, yo soy armonía.”

“Las palabras bondadosas son la mejor música terrenal
y esta música todo el mundo la puede tocar.”
Noel Clarasó

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Comentarios

  1. Jose Mesia  marzo 18, 2017

    bonita e interesante reflexión a ponerla en practica el lo dia dia

    • Regina Velasquez  marzo 19, 2017

      Gracias por tu comentario José, me alegra que hayas encontrado valor en el artículo. Namaste.

  2. Reina Perdomo  marzo 20, 2017

    Buen articulo, reflexiones que nutren la espiritualidad!

    • Regina Velasquez  marzo 20, 2017

      Gracias Reina por tu comentario, me alegra que le encuentres valor a mis reflexiones. Namaste

  3. norma altuzarra  marzo 21, 2017

    La palabra es vida y tiene poder!

  4. Chettina  abril 22, 2017

    La Palabra es Vida, no es lo que entra por tu boca lo que contamina, sino lo que de ella sale porque proviene del corazón.